domingo, 30 de diciembre de 2012

Una vez mas desde China...Feliz Navidad


Queridos amigos y familia,

...de nuevo volvemos a escribir el post navideño, pero esta vez desde Shenzhen, y con algunos días de retraso gracias a las guerras constantes entre Google y China. Son las segundas Navidades que pasamos lejos de todos vosotros, estamos los dos acompañados de un millón de Chinos que no le dan bola a la Navidad. Para no ser creyentes, debo decir que se han adaptado bastante bien a las costumbres occidentales...las calles decoradas, miles de Santas en los comercios y te felicitan la Navidad como lo harían en casa.




Nosotros decidimos darnos un paseo por Hong Kong, fuimos a cenar a un restaurante Singapurense-Malayo...y pudimos pedir una buena langosta al Chili...mmmm... Que suerte la nuestra, verdad! A casi media noche nos regresamos en el autobús, pasamos las ultimas horas en casa recordando lo afortunados que hemos sido en nuestra aventura asiática, y lo mucho que hemos aprendido. Por mi parte sobre todo, a estar lejos de la gente que quiero pero no sentirte sola, siempre acompañada en pensamiento por ellos.
Una buena muestra ha sido la cena de Navidad con mi familia, como a las 5 de la madrugada, en pijama y lagañosa, me senté delante del ordenador, encendí el Skype y en unos minutos estaba sentada con mi familia celebrando virtualmente las fiestas. Ahora no me puedo imaginar lo duro que seria la distancia sin el gran invento de Internet.


Al menos este ano podremos ir a Lima, estaremos en fin de ano con la familia de Richard. Algunos de vosotros os preguntareis por que viajamos tanto...pues es que la desconexión China es muy necesaria. No os lo vais a creer pero estar mas de 4 meses aquí se hace cuesta arriba, y tienes la necesidad de comunicarte con la gente (aunque sea en ingles), comer saludable, ver el cielo azul, respirar aire fresco y no tanto CO2, conectarte de "verdad" a Internet y no escuchar bocinas en cada esquina. Es saludable y muy necesario salir...

Lo dicho...seguiremos informando, la próxima vez desde el otro lado del mundo. Increíble como hemos llegado a hacer posible estar en un día a mas de miles, millones de km. Si eso lo hubiera sabido mi abuelo cuando se fue a Alemania quizás hubiera llegado mas lejos.